logo

RECIENTES

Sitios de Interés

Vacaciones; la escuela para padres



Publicado por: Jesus Andriano en

julio 8, 2016 1506 Visitas



Inicia el período vacacional para los estudiantes de diferentes niveles educativos de acuerdo con el  calendario de 200 días que plantea la SEP, y con ello termina un proceso educativo que se valida mediante un documento que manifiesta el haber cursado un grado académico, a partir de la valoración de los propósitos planteados al inicio del ciclo escolar. Lejos de pensar que es un proceso que termina; la dinámica social se transforma, e inicia la incertidumbre en la mayoría de las familias sobre el cuidado de los hijos en el periodo establecido; bajo el desconocimiento de ¿cómo ocupar el tiempo destinado a la escuela?, los días de vacaciones resultan estresantes sobre todo cuando no se genera un plan vacacional.

 

Antes de culminar el ciclo escolar, surge un sinfín de interrogantes por parte de los padres con respecto a la temporalidad y sentido de las vacaciones; que lejos de causar incertidumbre permiten identificar cuál es la perspectiva que tiene la sociedad con respecto a la escuela: ¿Y ahora maestra (o) que voy a hacer con mi hijo(a)?, ¿Cómo le hago para cuidar a tres?, Maestra (o) yo trabajo, no puedo cuidarlos, ¿Por qué tantos días de vacaciones?, ¿Les va a dejar tarea?, ¿Sabe de algún curso de regularización o de verano?, ¿Existe algún libro de trabajo para las vacaciones?, ¿Qué guía me sugiere para ir adelantado el trabajo del próximo ciclo?

13589032_1353538954660971_673690650_o

Las respuestas suelen ser diversas con respecto a las necesidades y características del contexto, pero así mismo generan otras interrogantes desde la dinámica de la escuela como las siguientes: ¿Qué hace un maestro(a) con los alumnos durante 200 días del ciclo escolar?, ¿Cómo le hace un maestro para atender a más 40 alumnos, que no son sus hijos?, ¿Ser maestro, no es un trabajo?, ¿Es necesario dejar tarea en vacaciones?; hay recordar que el periodo vacacional es de solo 25 días.

 

Al no tener idea sobre qué hacer en las vacaciones, los alumnos suelen pasar horas frente a la TV o los videojuegos, interactúan mediante los dispositivos móviles en redes sociales, recorren los pasillos de las plazas comerciales, se concretan en actividades de ociosidad, o en el mejor de casos los padres deciden inscribir a sus hijos a los diferentes cursos que ofrecen escuelas privadas, organismos sindicales, casas de cultura, asociaciones civiles, etc. Sin tomar en cuenta los gustos o intereses del niño y propiciando que las actividades se conviertan en una tortura vacacional.

Vacaciones; la escuela para padres

Las vacaciones se encuentran planeadas desde la instrumentación de los programas de estudio, el término vacación del latín vacatio,-ōnis, se refiere a un “descanso temporal de una actividad habitual, principalmente del trabajo remunerado o de los estudios” de acuerdo con el Diccionario de la lengua española. Algunos especialistas consideran que los periodos largos sin actividad académica podrían afectar el ritmo del aprendizaje de los niños, otros señalan que dejar espacios prolongados de actividades sin un objetivo específico es perjudicial para los menores, por lo que se recomienda no dejarse llevar por la pereza y la comodidad, e implantar acciones que los saquen de la rutina e incentiven su imaginación, lo que ayudará a estimular su área creativa.

 

Los niños siempre están activos, de forma que todo el tiempo se encuentran realizando alguna actividad, descubriendo cosas nuevas, inventando juegos o desplazándose de un lugar a otro, por lo que es necesario encauzar su energía en actividades que favorezcan el desarrollo integral, en espacios que les permitan aprender sin el rigor de la escuela.

 

Las vacaciones están proyectadas, para no hacer rutinario aquello que fue planteado en la escuela, el tiempo de las vacaciones no se puede alterar con las actividades cotidianas de la educación, estimular la creatividad durante la infancia prepara a los niños para encontrar diferentes respuestas y soluciones en la vida adulta; las vacaciones sirven para transformar la realidad de la escuela, no para prolongar las actividades académicas.

images25

La escuela, no es una máquina de enseñar y aprender; Philippe Meirieu plantea que la escuela no puede reducirse a una lógica de servicio público, se basa en algo distinto a la simple eficacia de sus funciones sociales; por lo tanto, nos remite a identificar que los valores son principios establecidos en la familia y que en la escuela se reproducen las acciones aprendidas en el contexto; en este sentido la escuela no puede ser el refugio de los problemas que emergen de la sociedad, ni la solución a los mismos.

 

Artículo publicado originalmente en el Portal de Jesús Andriano  http://www.jesusandriano.com/

¿Te gustó este artículo? Compártelo
Share on FacebookShare on Google+Tweet about this on TwitterShare on LinkedInPin on PinterestEmail this to someone

Comentarios

comments